La cultura occidental pone un gran énfasis en el hecho de ser amables con nuestros amigos, con nuestra familia y con nuestros vecinos que están atravesando alguna situación problemática pero no hace lo mismo cuando la persona que se halla en problemas es uno mismo. Aunque hay una regla que dice «Trata a los demás como quieras que te traten» lo más habitual sin embargo es que nos tratemos a nosotros peor que a nuestros amigos. Por ese motivo resulta fundamental comenzar hoy mismo a practicar un trato más amable y amoroso con nosotros mismos. Ser autocompasivos cuando nos sentimos inadecuados nos proporciona el mismo tipo de seguridad y protección que experimenta un niño cuando es abrazado cariñosamente. La autocompasión desactiva nuestro sistema de respuesta a una amenaza. Cuando la idea que tenemos de nosotros mismos se ve amenazada nuestra mente reacciona con respuestas de lucha contra nosotros mismos (empezamos a criticarnos a nosotros mismos). Luchamos contra esa parte de nosotros que no nos gusta, que nos hace sentir inferiores o con fallas. También puede suceder que nos aislemos, es decir nos alejemos de los demás lo cual equivale a la respuesta de huida ante una amenaza. A su vez puede que nos quedemos paralizados, rumiando, es decir dándole vueltas a un asunto sin poder dejar de pensar en eso. Estas tres reacciones, de lucha, huída o parálisis son lo opuesto a los tres componentes de la autocompasión: – la bondad – la humanidad compartida – y la atención plena o mindfulness.
En este video te comparto un ejercicio para que comiences a implementar en tu vida un trato más amoroso hacia ti misma o a ti mismo, que desactive tu sistema de defensa contra amenazas y active tu sistema de cuidado.
En esta práctica ejercitamos los tres componentes de la autocompasión (atención plena, humanidad compartida y la amabilidad hacia uno mismo/una misma).
Fuente: Cuaderno de Trabajo de Mindfulness y Autocompasión. (Neff y Germer). Este es un libro muy accesible, para todo público. Recomendable para todas las personas que se inician en la práctica de la autocompasión.